Un buen líder confía en si mismo y reconoce que es el éxito de su equipo el que le llevará a alcanzar sus objetivos. Deja de lado los miedos a ser opacado o superado y nutre tu equipo de trabajo con grandes talentos, de nada te servirá tener personas que se limiten a asentir ante tus ideas cuando puedes contar con puntos de vista nuevos y actualizados que potencialicen tu labor.
Te dejamos algunas razones por las que es más valioso de lo que crees traer personas inteligentes a tu equipo:
1. Podrás confiarles cualquier tarea, sabrás que con las herramientas necesarias obtendrán un gran resultado.
2. Al poder delegar, tendrás tiempo para concentrarte mejor en las áreas más estratégicas de la compañía o del área que lideras.
3. Promoviendo espacios de comunicación e intercambio de información, tendrás en tu equipo personas propositivas que refresquen la dinámica laboral y la hagan fluir.
4. Un empleado inteligente se dará cuenta de tú capacidad para liderar y engranar grandes talentos y te dará el crédito.
Ahora para que este tipo de equipos funcione requerirá que escuches a los demás, que valores las diferentes opiniones y puntos de vista, que sepas delegar, que empoderes a las personas y las motives a tomar decisiones, y, entre muchas otras, que confíes en tu papel y dejes a los demás hacer el suyo.