Las primeras quincenas del año son clave para el sector empresarial, pues corresponden a la época del pago de las cesantías, una prestación social obligatoria para todas las compañías que trabajan con empleados vinculados bajo la figura de contrato laboral.
En ese orden de ideas, el pago de cesantías tiene dos momentos importantes: el 31 de enero y el 14 de febrero.
Sobre los intereses
En primer lugar, la empresa debe pagar a sus trabajadores un rendimiento sobre el valor de la prestación social, que se hace directamente al trabajador en su quincena del 31 de enero.
Para hacer el cálculo de los intereses, se deben multiplicar los días laborados por 0,12; el resultado se multiplica por el salario mensual y se divide entre 360.
Pago de las cesantías
Por otra parte, en la primera quincena de febrero tiene lugar el pago de las cesantías, pues antes del 14 del segundo mes de cada año, los empleadores deben consignar este pago a la Administradora de Fondos de Pensiones y Cesantías (AFP) a la cual estén afiliados los trabajadores.
Esta prestación social con pago anual es el resultado de la multiplicación de los días laborados por el salario mensual, dividido entre 360.
Cada AFP tiene su proceso para el pago de las cesantías; generalmente, el trámite es muy sencillo: el empresario debe diligenciar la Planilla Integrada de Liquidación de Aportes (Pila) y después realizar la transferencia bancaria.
Sin embargo, es importante que visites el sitio web de las AFP, pues además de encontrar allí el descargable que debes diligenciar, accederás a algunos beneficios o requisitos de la compañía.
Una vez realices el pago, la AFP se encargará de notificar, vía correo electrónico o mensaje de texto, a tus trabajadores que ya su ahorro ha sido consignado y pueden disponer de él para educación, vivienda o solventar su economía tras la terminación del contrato o la disminución de ingresos justificados.